Los preparativos de un viaje, ya sea una escapada de fin de semana, unas vacaciones en el extranjero o un viaje de negocios, pueden resultar estresantes. Si, además, usas , es muy importante planificarlo con antelación: tienes que asegurarte de que llevas todos los productos necesarios para tu rutina de mantenimiento y lo último que quieres es que un despiste dé al traste con todos tus planes. Para asegurarte de que todo sale según lo previsto, nuestros ópticos han recopilado estos consejos para viajar con lentillas. ¡Sigue leyendo antes de hacer la maleta!
Consejos para viajar con lentillas
Prepárate con antelación
Si te organizas de antemano, viajar con lentillas es facilísimo. Todo se resume a seguir las indicaciones de uso que te dieron en la óptica y a llevar todos los productos necesarios. Dormir con lentillas, salvo ciertas excepciones y siempre bajo la supervisión de un especialista, está desaconsejado, aunque sea una sola noche. Es importante que te quites las lentes de contacto antes de dormir (incluso si es una siesta corta) y las guardes en un portalentillas con líquido.
Pásate a las lentillas diarias
Pero si lo que quieres es olvidarte del mantenimiento, pasarte a las lentillas diarias es tu mejor opción. Las lentillas diarias son más cómodas, prácticas e higiénicas, convirtiéndolas en una gran elección a la hora de viajar. Incluso si sueles utilizar lentillas mensuales o quincenales no es una mala idea pedirle a tu óptico que te recomiende unas diarias para el viaje, ya que te pueden hacer la vida mucho más fácil: como no necesitan limpiarse ni guardarse en líquido, simplemente puedes quitártelas por la noche y estrenar un par nuevo a la mañana siguiente. Si durante una excursión o en la playa se te ensucian, puedes tirarlas y ponerte otras frescas al momento. Además, tienen un diseño más fino que las reutilizables y transpiran mejor, por lo que son ideales para combatir el ojo seco causado por el aire acondicionado de aviones o trenes.
Prueba everclear ELITE
A la venta en exclusiva en Vision Direct, everclear ELITE son unas lentillas diarias cómodas y prácticas. Gracias a su diseño ultrahidratante, son ideales para usuarios con sequedad ocular. Están fabricadas con hidrogel de silicona, un material de última generación que permite el paso de más oxígeno, haciendo que puedas llevarlas puestas hasta 12 horas sin picor ni irritación. Además, incluye un filtro UV para proteger los ojos de los rayos ultravioleta cuando estés tomando el sol.
Hazte con un pack de viaje de lentillas
Llevar el líquido de lentillas en el avión puede resultar un problema para ciertos usuarios, pero es fácil de solucionar con los líquidos de viaje Estos packs son fáciles de transportar, no ocupan casi espacio y no gotean, permitiéndote seguir con tu rutina de mantenimiento estés donde estés. Si quieres llevar todo lo relacionado con tus lentillas en un mismo sitio, hazte con un kit esencial para lentillas reutilizables o un kit esencial para lentillas diarias, ambos con una práctica funda portalentillas.
Lleva lágrimas artificiales
Si aún no has añadido unas lágrimas artificiales a tu equipaje, hazlo ahora y no te arrepentirás. Cuando viajas en avión y notas sequedad, o al salir de nadar y tienes los ojos irritados, las lágrimas artificiales te proporcionarán un alivio inmediato. Recuerda que si vas a llevar un bote de gotas o culquier otro líquido del tamaño permitido, debes meterlos en una bolsa de plástico con autocierre. Si buscas una marca fiable para tu próximo viaje, nuestros ópticos recomiendan las lágrimas artificiales everclear, elaboradas con una receta natural y efectiva, ideales para ojos sensibles.
Usa lentillas con filtro UV
No hay mejor inversión que un buen par de gafas de sol homologadas, pero si quieres disfrutar de la protección más completa, te recomendamos que uses lentillas con filtro UV. Muchas lentes de contacto, como Acuvue Oasys o 1 Day Acuvue TruEye, ya incluyen filtros que bloquean hasta el 90% de rayos UVA y el 99% de rayos UVB. Es importante protegerse de los rayos ultravioleta del sol, ya que una exposición prolongada puede generar la aparición de cataratas, quemaduras en la córnea y degeneración macular.
Compra gafas de natación graduadas
El agua y las lentillas no se llevan nada bien, es por eso que nadar con lentillas está altamente desaconsejado. El agua contiene ciertas bacterias y microorganismos que pueden pegarse a la lente y, por tanto, al ojo, causándote una infección ocular. Además, el agua también puede deformar la lentilla, haciendo que veas borroso y que tengas que tirarla. Por eso, la mejor opción es hacerte con unas gafas de nadar graduadas, que te permitirán ver bajo el agua con total claridad: hoy en día existen multitud de modelos para corregir miopía e hipermetropía, e incluso algunas para astigmatismo. Si aun así prefieres usar lentillas, te recomendamos llevar diarias junto con unas gafas de natación bien ajustadas, para evitar que el agua entre en contacto con ellas. Después de nadar, quítate las lentes de contacto, tíralas y ponte un par nuevo.
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